Desde el 1 de septiembre, han entrado en funcionamiento las medidas de incentivo a la contratación laboral establecidas en el Real Decreto-ley 1/2023. Estas medidas tienen como objetivo principal promover la contratación de personas desempleadas, con un enfoque especial en aquellas en situación de vulnerabilidad.
Las novedades más destacadas incluyen:
1. Los incentivos se centran en contratos indefinidos y en la transformación de contratos temporales en contratos indefinidos, especialmente para personas en situación de atención prioritaria.
2. Se simplifican y estandarizan los requisitos para las empresas beneficiarias, como la obligación de mantener a los trabajadores contratados en alta en la Seguridad Social durante al menos tres años desde el inicio del contrato incentivado.
3. Se unifican las cuantías de las bonificaciones en las cotizaciones de la Seguridad Social, estableciendo una cuantía de bonificación por cada mes natural completo.
4. Se introducen bonificaciones para la contratación indefinida de jóvenes con baja cualificación, personas que realizan formación práctica en empresas y trabajadores agrarios.
5. Se prioriza la contratación a tiempo completo, reduciendo las bonificaciones para las jornadas parciales inferiores al 50% de la jornada a tiempo completo.
6. Se fortalece el papel de la Negociación Colectiva en materia de empleo, permitiendo acuerdos que incluyan compromisos de mejora del empleo.
7. Se establecen diversas cuantías de bonificaciones según el tipo de contrato y la situación de la persona contratada, incluyendo mayores incentivos para mujeres y personas mayores de 55 años.


